Hebreos 12:10|NTV
Pues nuestros padres terrenales nos disciplinaron durante algunos años e hicieron lo mejor que pudieron, pero la disciplina de Dios siempre es buena para nosotros, a fin de que participemos de su santidad.
La disciplina hace parte de nuestro crecimiento en nuestro caminar con Cristo, imaginemos a un niño que no se disciplina ¿cómo será su crecimiento?, de seguro todo lo querrá rápido, tipo microondas, y el día que no consigue lo que quiere, termina haciendo un berrinche sin importarle el lugar donde esté, ni las personas con las que se encuentren, avergonzando a sus padres. Toda disciplina en nuestras vidas, nos ayuda a madurar, porque todo lo que atravesamos es para fortalecer nuestra fe y confianza en Dios. La corrección produce en nosotros disciplina y resistencia.
TODO AQUEL QUE ES DISCIPLINADO ES UN HIJO AMADO, tal como lo dice su palabra en Hebreos 12:6: Pues el Señor disciplina a los que ama y castiga a todo el que recibe como hijo. Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo a que recibe por hijo. Su amor es tan grande que lo lleva a disciplinarnos con el único fin de prepararnos, para llevarnos al cumplimiento de nuestro destino. En este proceso Dios va quitando de nuestra vida, cosas que parecían importantes, pero al final no hacen parte de nuestro futuro. Él empieza a romper ataduras, ligaduras, empezamos a experimentar transformaciones que van desde la manera de cuidar nuestro cuerpo, el cual se convierte en templo del Espíritu Santo, hasta pasar tiempo en oración y comunión con él.
En medio de la disciplina, recibimos las fuerzas del Espíritu Santo.
TU CAPACIDAD DE SOPORTAR
Muchos si hubieran pasados por los procesos que tú has tenido que atravesar, ya estuvieran muertos o alejados de Dios, pero tú marcaste la diferencia, tu amor y pasión por Dios es tan grande que aunque la disciplina sea dura, no puedes imaginar tu vida lejos de Él ¡Eso te hace diferente!. Antes de pasar por la disciplina eres inmaduro, dices que cumplirás una meta y a la mitad te das por vencido, pero cuando pasas por la disciplina del Señor, tu mente es transformada a una mente de victoria y hasta que no lo logras tu objetivo, no te detienes, sino que sigues avanzando, hasta llegar a tu meta.
AMADO(A); Los verdaderos hijos de Dios, somos disciplinados, con el fin de ser cambiados, y que nuestros corazones se libres de todo lo que a él no le agrada, para sacar de allí el RESENTIMIENTO, LA FALTA DE PERDÓN. En el proceso somos humillados y perfeccionados en su santidad. No desmayes si hoy estás siendo disciplinado, porque mañana vas a ver los frutos de esta disciplina. Recuerda el amor de Dios en tu vida es la clave para no desmayar aún en medio de la prueba.
Proverbios 13:1|TLA
El hijo sabio acepta que su padre lo castigue; el hijo malcriado no permite que le llamen la atención.
La Gracia del Señor sea con todos ustedes,
Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
NTV| Nueva Traducción Viviente
TLA| Traducción en lenguaje actual