Mateo 14:24-27 RVR1960| Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el viento era contrario. 25. Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar. 26. Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. 27. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!
Cuando el Señor te da una palabra y empiezas a moverte en base a esta, aquello que antes habías podido manejar, resulta que ahora te cuesta enfrentarlo, porque parece que es mucho más grande que tus posibilidades. Y esto fue lo que vivieron los discípulos; Jesús les dijo que pasaran al otro lado mientras Él despedía a la multitud y subía al monte orar, pero mientras ellos avanzaban, fueron sorprendidos por la tormenta; que siendo ellos pescadores, conocedores de la navegación y el manejo de la barca en medio de una tormenta, se sintieron fatigados por lo que estaban enfrentando y sin fuerzas para seguir, pero esto que ellos estaban viviendo, solo hacía parte de su preparación, para que ante sus ojos se pudiera manifestar un imposible.

En ocasiones Dios permite que la tormenta golpee la barca, pero su único fin, es que su gloria se revele de una manera extraordinaria y única en nuestras vidas; y aunque a veces no entendamos la manera en la que Él hace o permite las cosas, con los años hemos podido entender que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan para bien.
Romanos 8:28 RVR1960| Y sabemos que a los que aman a Dios,
todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Notemos esto: Cuando los discípulos vieron a Jesús, se turbaron y dieron voces de miedo. No pudieron reconocer al Maestro a causa de la turbación que sus corazones estaban sintiendo. Y de esto es lo que Dios nos quiere hablar en este devocional; no permitas que ninguna situación por difícil que se vea turbe tu corazón, al punto de que tu visión se distorsione y el cansancio te haga renunciar a seguir remando para llegar a la otra orilla. No vas sólo, recuerda que Jesús va contigo caminando por encima de tus circunstancias. Enfoca tu mirada en Jesús y en lo que Él hará en medio de esa tormenta que hoy estás viviendo, porque darás testimonio de que aquellos que confiaron en Él, no fueron avergonzados.
Salmos 34:5-7 RVR1960| 5 Los que miraron a él fueron alumbrados, Y sus rostros no fueron avergonzados. 6 Este pobre clamó, y le oyó Jehová, Y lo libró de todas sus angustias. 7 El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, Y los defiende.
Amado lector, no permita que el enemigo siga turbando tus pensamientos con tristeza y amenazas de derrota; recuerda quien está contigo y lo poderoso que es, porque esa tormenta que hoy vives no es para destruirte, sino para afianzar tu fe y puedas ver a Dios revelarse en tu vida de una manera sobrenatural. Así que creele, porque verás las aguas moverse, pero así mismo los milagros ocurrir y tu familia siendo prosperada, porque aquel que camino sobre las aguas, sigue caminando entre nosotros. Oro, para que el Espíritu Santo se derrame sobre todo aquel que le invoque y que en medio de su clamor y grito de angustia, pueda recibir el bálsamo y la paz, que sólo El sabe dar. Amén.
Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.
Con amor,
Fabio R. Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960