MUJER, ERES LIBRE, VUELVE A SONREÍR

Lucas 13:10-13 RVR1960| Enseñaba Jesús en una sinagoga en el día de reposo;[a] 11 y había allí una mujer que desde hacía dieciocho años tenía espíritu de enfermedad, y andaba encorvada, y en ninguna manera se podía enderezar. 12 Cuando Jesús la vio, la llamó y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad. 13 Y puso las manos sobre ella; y ella se enderezó luego, y glorificaba a Dios.

Dios siempre llegará en el momento correcto, no antes ni después, y aunque para ti sea larga la espera, el milagro mismo ocurrirá en su tiempo kairos. Jesús mientras enseñaba en la sinagoga se percató que entre ellos había una mujer que desde hacía dieciocho años estaba enferma, y Él movido en compasión le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad. ¡Tremendo!, cierto. Cuanto tiempo tendría ella soñando con algo así, cuanto tiempo tendría imaginando que tan diferente fuera su vida sin esa enfermedad, y sin ella buscar la sanidad, la misma se dio, ella experimento el tiempo perfecto de Dios, para volver a sonreír y testificar no solo con sus palabras, sino que su milagro era visible ante todos.

Ya no era conocida como la mujer encorvada por causa de su enfermedad que venía a la sinagoga, sino que ahora todos hablarían de lo que ocurrió en ella, sin obviar a Jesús de sus conversaciones. Y sabes, en tu milagro, siempre van a hablar del obrador de milagros: Sí, Jesús de Nazaret. Sé que en ocasiones te podrás preguntar: ¿Por que la escogió a ella? porque ella nunca puso su condición de salud para no seguir yendo a la sinagoga, y aunque se le dificultaba caminar, moverse con agilidad, seguía allí escuchando la enseñanza de Jesús, y esto nos habla de su fe, quien llevando muchos años siendo azotada por un espíritu de enfermedad, no se dio por vencida, sino que se mantuvo fiel a allí.

Mujer, y esto es lo que Dios desea hablarte a través de este devocional, porque es fácil rendirse cuando ya se ha esperado mucho, pero no pierdas la esperanza, porque en su tiempo perfecto verás la respuesta de las lágrimas que has derramado en tus oraciones. La labor que has hecho no es en vano y tus constancia, demuestra que eres una persona confiable, que no se quiere rendir frente a los obstáculos que el enemigo le ha puesto, sino que permanece fiel a Dios.

Salmos 56:8 DHH |8 (9) Tú llevas la cuenta de mis huidas;
tú recoges cada una de mis lágrimas. ¿Acaso no las tienes anotadas en tu libro?

Notemos esto: Lo imposible lo hace Jesús, pero tu fidelidad, provocará que el milagro ocurra en el momento que menos lo esperas. Más que nunca, en estos tiempos la mujer está siendo fuertemente atacada por el enemigo, tratando de impedir que esta pueda ser útil en las manos de Dios. No se cuantas veces has tenido que luchar con los señalamientos y darte ánimo para no caer en la actitud de víctima, pero aunque otros no lo puedan creer, aquel que trajo sanidad sobre la mujer encorvada, también lo hará sobre ti, y tu sonrisa se restaurará.

Juan 11:40 RVR1960| Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?

JESÚS TE ESTÁ MIRANDO
Las palabras de Jesús para esta mujer demuestran un amor incomprensible, porque eran las palabras correctas, aquellas que sus oídos deseaban escuchar. ¿Que estás escuchando? Porque las palabras de Jesús fueron las que trajeron libertad a esta mujer. En ocasiones puedes estar escuchando una voz incorrecta, que solo resaltará tus errores, sin reconocer tus atributos y esto puede paralizar tu vida; pero Jesús vino para romper con todo decreto del enemigo y darte la libertad si tu así se lo permites.

Salmos 34:19 RVR1960| Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará Jehová.

Amada hermana, Dios está a punto de hacer algo nuevo en tu vida, pero debes aprender a descansar en Él, porque es tu fe lo que impulsará a seguir avanzando, sin haber recibido aún el milagro; sigue sirviéndole a Dios, no renuncies a tu servicio, porque el día de recibir tu milagro, pronto llegará. Amén.

Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

Con amor,
Fabio R. Ventura