CAMINANDO CON CRISTO

Marcos 10:46-48 RVR1960| Entonces vinieron a Jericó; y al salir de Jericó él y sus discípulos y una gran multitud, Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino mendigando. 47. Y oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! 48. Y muchos le reprendían para que callase, pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!

Bartimeo era ciego y esta discapacidad lo llevó a mendigar, pero a pesar de su pobre condición, él pudo llamar la atención de Jesús a causa de su clamor. En ocasiones tendremos que ser muy perseverantes en nuestra búsqueda de Jesús, por cuanto nuestra fe será probada y los obstáculos que se interponen pueden provocar una tormenta emocional en nuestras vidas, pero la perseverancia por medio de la fe, nos dará la victoria en todo tiempo.

Notemos esto: ¿Jesús le respondió a Bartimeo al primer llamado? Ciertamente no, pero la fe de Bartimeo lo llevó a provocar que Jesús se detuviera y atendiera su llamado. Esto nos enseña, que la perseverancia en el clamor, siempre nos dará la victoria. Aunque en ocasiones el ser humano suele rendirse fácilmente, y empieza a cambiar sus clamores por quejas, permitiendo que el enemigo le compare con otros, cuando aún en tus limitaciones físicas, cosas grandes Dios quiere hacer.
El tiempo de Dios es perfecto y Él hará las cosas conforme a su voluntad, así que mientras esperas tu respuesta, sigue orando, porque aunque no lo veas, Dios el milagro está haciendo.

Tu oído debe conectarse al cielo. ¿Para que usas tu oído? Bartimeo era ciego, pero no sordo, así que cuando él escuchó que Jesús pasaba por allí, lo que su oído escuchó activó en él un clamor perseverante, que logró llamar la atención de Jesús y recibir su milagro. Es tiempo de escuchar lo que Dios tiene para ti y desechar las voces del enemigo, aquella que quiere desanimarte para que no sigas avanzando hacia tu destino. Levanta tu fe y escucha lo que Dios tiene que decirte, porque su palabra es vida y en ella hay transformación.

Amado lector, Dios está escuchando tu oración y aunque aún no veas la respuesta a la misma, sigue clamando y perseverando en tu oración, porque el milagro por el que tanto has estado orando, es el que te ha llevado a tener una mayor comunión con Dios, porque cuando otros lo creían imposible, tú has podido avanzar ignorando las voces que te intentaron detener, para darle paso a lo que Él quiere hacer. Amén.

Lucas 1:37 RVR1960| porque nada hay imposible para Dios.

Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

Con amor,
Fabio R. Ventura

Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s