PORTADOR DE LA PROMESA

Génesis 12:1-3 RVR1960| Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. 2. Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. 3. Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.

Cuando Abraham escuchó la voz de Dios, su vida cambió totalmente, pasó de ser conocido como el hijo de un idolatra, el cual le rendía culto a ídolos extraños (lea Josué 24.2), a ser conocido como amigo de Dios y padre de la fe. Abraham estaba establecido en el territorio donde había nacido, rodeado de sus familiares y amistades, pero fue escogido por Dios para sacarlo de esa cultura de idolatría, prostitución y esclava del pecado. Para muchos eso era algo imposible, pero nada hay imposible para Dios, y le pidió que saliera de su tierra y parentela, a un nuevo territorio que si caminaba en obediencia iba a poder conocer.

Abraham decidió creerle a Dios, ¿Tú estás dispuesto a hacerlo?
Él dejó la comodidad y lo conocido, para ir detrás de una promesa que le hacía sentir que era lo correcto. Cuando Dios nos llama nos pide obediencia y confianza, porque aunque no veamos el cumplimiento de su palabra, debemos tener la certeza que la misma se cumplirá en su tiempo perfecto. En ocasiones el temor nos querrá impedir que emprendamos el camino de fe, pero es en ese momento donde más nos debemos acercar a Dios y aunque la duda llegue, recordemos que delante de nosotros va Él abriendo el camino para transitar hacia nuestro destino. Puedes sentir que ya no puedes más, pero hoy Dios quiere recordarte que no es en tus fuerzas, sino en las de Él y si le entregas tus cargas, el camino lo transitaras mucho más rápido.

Mateo 11:28 RVR1960|Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados,
y yo os haré descansar.

Amado lector, en ocasiones ignoramos la voz de Dios porque nos cuesta creer que podamos ser vasijas útiles para Él, pero debes recordar que Dios no mira nuestros defectos, sino lo resistente que somos para caminar hacia la tierra de la promesa. Muchas veces te has preguntado porque a mi, porque yo, porque estoy viviendo todo esto, y aunque te has lamentado por tantos días de dolor que has tenido que vivir, hoy Dios te recuerda, que no han sido en vano tus luchas y que aún de tierra de miseria, idolatría, dolor, te sacará y te introducirá a la tierra que fluye leche y miel, y muchos darán testimonio que verdaderamente grande es Jehová y le da a sus hijos mucho más allá de lo que estos le piden; así que sécate esas lagrimas y empieza a dar pasos de fe, porque Él va delante de ti abriendo caminos en el desierto y recreando ríos en la sequedad. Amén.

Génesis 13:17 TLA|Anda, recorre la tierra a lo largo y a lo ancho,
porque yo te la estoy entregando».

Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

Con amor,
Fabio R. Ventura