UNA FE INDETENIBLE

Lucas 22:31-33 RVR1960| Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí Satanás os ha pedido para zarandearos como a trigo; 32. pero yo he rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus hermanos. 33. El le dijo: Señor, dispuesto estoy a ir contigo no sólo a la cárcel, sino también a la muerte.

Jesús en sus últimos días de ministerio terrenal conversó mucho con sus discípulos, le daba instrucciones y revelaciones de las cosas que surgirían a corto y largo plazo; les aconsejaba que siguieran perseverando aunque Él no estuviera entre ellos.

Pero si notamos bien, Jesús más que un consejo le hizo una advertencia a Pedro para que estuviera apercibido, porque Satanás le había pedido permiso a Dios para sacudirlo como a trigo, pero Pedro oyó más no escuchó las palabras de Jesús, por esto leemos que su respuesta fue basada en las emociones del momento.

Sí aprendes a escuchar, y meditar en las palabras, no reaccionarás por impulso, sino que te mantienes alerta y listo para vencer los ataques del enemigo, porque comprendes que el ángel de Jehová pelea por ti y te ha entregado la victoria.

1 Corintios 10:13 NVI|Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no sea común al género humano. Pero Dios es fiel, y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida a fin de que puedan resistir.

Notemos esto; Podemos preguntarnos ¿Por qué Jesús no detuvo el ataque de Satanás? Y la respuesta está en la misma Biblia, cuando Jesús dice que va a orar al Padre para que la fe de Pedro no mengue, es decir que esa prueba que Pedro tendría que atravesar, solo fue un entrenamiento para que su fe en Dios se desarrollara por encima a lo que él humanamente estaba acostumbrado.

Pedro era muy espontáneo, y esa misma espontaneidad lo llevó a hacer cosas arriesgadas, pero también lo llevaron a ser sacudido por las acciones impulsivas que hacía.

UNA FE FUERTE
Mantente creyendo en sus promesas aunque el proceso sea duro; la palabra de Dios es lo único que puede fortalecer tu fe. Según: Romanos 10:17| Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Entonces teniendo este conocimiento, cada día debes meditar y estudiar su palabra para que tu fe sea indetenible. Aunque en ocasiones algunos cristianos le dan más importancia a lo material antes que a lo espiritual, creen más en la astrología, que en lo que dice la Biblia, y cuando viene el sacudimiento, no tienen la fe suficiente para sostenerse, porque espiritualmente no están nutridos con su palabra. Todo aquel que desee salir victorioso del proceso, debe trabajar en mantener su fe bien alimentada con la palabra de Dios.

PEDRO Y SU CONFIANZA
¿Cuál fue la reacción de Pedro ante la advertencia? Según Lucas 22:33 El le dijo: Señor, dispuesto estoy a ir contigo no sólo a la cárcel, sino también a la muerte. Él tenía su confianza en su propia fuerza, no en las de Dios y esto nos puede pasar, creemos que cuando llega el desempleo, nuestros estudios y buen currículum nos abrirán las puertas al éxito, o la agenda de contactos; pero que equivocados estamos, porque el único que tiene poder y autoridad para abrir esa puerta es Dios.

Romanos 9:16 RVR1960| Así que no depende del que quiere,
ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia.

Amado lector, No límites a Dios, si estás siendo procesado, es porque se está abriendo una nueva oportunidad de bendición que te permitirán entrar a lo extraordinario de Dios. Y aunque este entrenamiento es temporal, el mismo está forjando tu carácter, tu dominio propio, y quebrantando tu orgullo y la altivez, que muy posiblemente han sido las causantes de que puertas se te hayan cerrado en un pasado. Confía, porque el tiempo del cumplimiento de tus promesas se aproxima, así mantente firme y fortalecido en su palabra, porque tu mejor temporada, pronto está por empezar. Sécate las lágrimas y recobra ánimo, porque Dios no se ha olvidado de ti, y cada una de sus promesas las cumplirá. Ha sido largo el proceso, pero no es para siempre. Ora, lee su palabra y empieza a vivir una vida de agradecimiento, porque cada una de tus lágrimas están en su redoma (Salmo 56:8). Amén.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com