Hechos 3:7-10 RVR1960| Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; 8. y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios. 9. Y todo el pueblo le vio andar y alabar Dios. 10. Y le reconocían que era el que se sentaba a pedir limosna a la puerta del templo, la Hermosa; y se llenaron de asombro y espanto por lo que le había sucedido.
Seguimos nutriendo nuestro espíritu con esta hermosa historia, donde la vida de un hombre fue transformada por el poder de Dios; porque el principal objetivo del Espíritu Santo es revelarnos la bondad de Dios a través de su palabra. La Biblia misma nos dice que este hombre era cojo de nacimiento, es decir que nunca había experimentado el saltar, levantarse o correr; por esto cuando el poder de Dios cae sobre la vida de alguien, las limitaciones que lo ataban empiezan a romperse y todos podrán ser testigo del poder sobrenatural de Dios, y levantar cánticos de alabanza y adoración.

Notemos esto: Este hombre pedía limosna todos los días, es decir vivía de las migajas que otros le podían dar, por esto él estaba esperando que Pedro y Juan le dieran aquello que él ya estaba acostumbrado a recibir de los demás. Pero cuando una persona está llena del Espíritu Santo, y se deja usar por Él, podrá hablar en el Nombre de Jesús con autoridad, sabiendo que la condición del otro podrá cambiar, y el milagro se manifestará.
Dios aún sigue haciendo milagros, Él es el mismo ayer, hoy y siempre (Hebreos 13:8); Él está buscando un pueblo apasionado por las almas, hombres y mujeres que le diga heme aquí (Isaías 6:8); levántense en oración (Efesios 5:14), para que otros puedan experimentar la salvación, la sanidad, la liberación y sobre todo su misericordia.
EL TIEMPO DE DIOS ES PERFECTO
La Biblia no nos da mayores detalles de cuánto tiempo tenía de estar en esa puerta pidiendo una moneda, pero por el relato final, podemos concluir que tenía muchos años siendo llevado allí para pedir limosna. Pero Dios en su perfecta voluntad determinó que ese sería el día donde la historia de ese hombre sufriría una metamorfosis, pasando de ser un lisiado a ser un hombre sanado.
Amado lector, Llegó el tiempo de que saques de ti aquello que portas de Dios y que el mundo lo vea, que reconozca que tú eres aquel que recibió el milagro que tanto anhelaba tu corazón, porque aunque el mundo te vio como alguien sin valor, para Dios eres su perfecta obra y quiere exhibirla al mundo, para que vean que sólo en Él hay salvación y vida eterna. Amén.
La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.
Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960