21 DÍAS DE AYUNO & ORACIÓN:CAMBIA TUS VESTIDOS DE LAMENTO

1 Samuel 1:7-10 LBLA | 7…Y Ana lloraba y no comía. 8 Entonces Elcana su marido le dijo: Ana, ¿por qué lloras y no comes? ¿Por qué está triste tu corazón? ¿No soy yo para ti mejor que diez hijos? 9 Pero Ana se levantó después de haber comido y bebido en Silo, y mientras el sacerdote Elí estaba sentado en la silla junto al poste de la puerta del templo del Señor, 10 ella, muy angustiada [b], oraba al Señor y lloraba amargamente.

Hay muchos pasajes de la Biblia que podríamos haber elegido para hacer este devocional, pero creo que es significativo este mensaje para cada una de estos hombres y mujeres que se han tomado su tiempo para leerlo.

Sabes no es casualidad que hoy estés aquí y digas: Esta palabra es para mí, y así lo es, es el Señor recordándote que necesitas cambiarte esos vestidos de lamento y sufrimiento. ¿Crees que ya ha sido suficiente llorar? Yo creo que sí, y la verdad esa no es la posición a la que Dios te ha llamado, cabizbaja, espalda encorvada y ojos hinchados, por causa del dolor que otros te han estado causando todo este tiempo.

ATRIBULADOS, PERO NUNCA DERROTADOS
La melancolía que sientes por los difíciles procesos que has tenido que pasar, no pueden seguir dominando tus emociones, Jesucristo vino para romper con toda atadura y maldición que te ha mantenido estancado y no te han permitido avanzar hacia la nueva temporada de tu vida. Hoy quiero hablarte a ti, que mientras el Espíritu Santo está ministrando tu vida, sigues aceptando los dardos del enemigo. No eres un fracasado, Dios no te ha desechado, las palabras que otros han lanzado para destruirte, y esas heridas han manchado tus vestiduras de dolor, hoy la sangre de Cristo, las limpias y les devuelve su color original.

NINGUNA ARMA FORJADA PROSPERARÁ CONTRA TI
Es difícil creer muchas veces las promesas, cuando todo nuestro entorno nos grita que no se abrirá la puerta, o no obtendremos la aprobación, o simplemente no cumples con las cualidades, y las voces de Penina parecieran retumbar en la realidad que estamos viviendo, pero es la oración, el desnudar tu corazón cómo Ana, quien te llevará a salir del altar con una promesa y con la paz que necesitas, para empoderarte de esa palabra y caminar erguida con lo que Dios te dijo en esa intimidad.

La Biblia nunca menciona los nombres de los hijos de Penina, pero si menciona y dice claramente que Ana quedó encinta y tuvo un hijo, Samuel. Después de Samuel Ana tuvo cinco hijos más (tres varones y dos mujeres), y este hombre fue el profeta Samuel, quien tuvo el privilegio de ungir a los dos reyes de Israel, uno colocado por los hombres (rey Saúl) y el otro colocado por Dios (rey David). Entonces, no se trata de como empezaste, sino hacia donde quieres dejarte dirigir por Dios.

NO ENTIERRES TUS SUEÑOS
Hoy posiblemente no te encuentres en el territorio que por tanto tiempo has venido peleando en tus oraciones, pero aún en medio de ese lugar que Dios te tiene transitando, está forjando tu carácter y fortaleciendo tu comunión con el Señor. Así que no te rindas, no entierres tus sueños, porque aquello que pareciera imposible a los ojos del hombres, para Dios no lo es, Él te ha dicho: Si puedes creer veras la gloria de Dios, y es su gloria la que Él desea manifestar en tu vida, en tu casa, en tu familia, devolverte y retribuirte lo que era tuyo, y el enemigo te arrebató.

Amado lector, La oración es el instrumento que el Señor te ha dado para vencer los ataques del enemigo, así que no te dejes intimidar por sus amenazas, porque estás peleando contra un enemigo derrotado. Si el Señor se fijó en tí, es porque conoce las capacidades que tienes, para enfrentarlo con las estrategias que Él te ha entregado y posicionarte en el lugar que el Señor ha establecido para ti. No te acomodes en el área del dolor, es hora de levantarse y resplandecer, porque la gloria de Jehová ha llegado a visitar tu casa. Amén.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes. Amén.

Sandra Patricia Ventura
http://www.caminandocomojesus.com