21 DÍAS DE AYUNO & ORACIÓN:LA LLENURA DE SU ESPÍRITU SANTO

Hechos 2:1-4 RVR1960|Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. 2 Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. 4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.

Jesús ya había caminado durante tres años con los discípulos, enseñándoles a vivir conforme al Reino de los cielos, y a tener una relación personal con el Padre Celestial y no una religiosidad. Pero a pesar de todas sus enseñanzas, Él sabía que los discípulos necesitaban ese complemento para realizar la obra de Dios, con pasión y sin temor, por esto antes de partir les prometió al Consolador, al Parakletos (Juan 14:16-17).

Pero ese día no fue cualquier día, debemos tener bien claro que ese día fue el inicio del nacimiento de la iglesia del Señor, y como podemos observar la iglesia fue el resultado de la victoria obtenida por Jesucristo en la cruz del calvario, y está recibió la llenura de su Espíritu Santo, cuando éste descendió sobre ellos en pentecostés, mostrándole al mundo el poder glorioso de nuestro Salvador, porque esa llenura trajo cambios que impactaron las vidas y arrebataron muchas almas de las garras del infierno.

Y esto es lo que muchos hoy en día no entienden: La iglesia depende absolutamente del poder del Espíritu Santo, y no de la elocuencia de los hombres.

1-EL ESPÍRITU SANTO ES MÁS QUE UN DON
Los dones del Espíritu Santo, se nos revelaran a la medida que nos llenemos más del Señor en oración y en la búsqueda de su presencia, pero, que los mismos no sean visibles al ojo humano, no quiere decir que no estés lleno de su presencia. Y un ejemplo muy sencillo es cuando vemos a un hermano orando y este no ha recibido el don de lenguas, pensamos que no tiene la llenura del Espíritu Santo; pero también he conocido personas que hablan mucha lengua, y son tan religiosos que siempre ven lo peor en todo e incluso en todo momento tienen el dedo acusador si alguien no está de acuerdo con su forma de pensar, hablar o vestir.

Debemos tener muy claro que las lenguas que se derramaron en pentecostés, eran entendibles para los que la escuchaban, esto fue una manifestación del Espíritu Santo para atraer la atención de la multitud y traer salvación a los corazones. Porque Dios actuará de manera sobrenatural donde se le permita entrar, porque su única intención es que ninguno perezca, y aquello que estaba perdido hoy venga a sus pies.

El Espíritu Santo se manifestará en el fruto que Él mismo produce en un corazón humilde, y que reconoce que depende en la totalidad de Él. Porque de que sirve hablar todas las lenguas, si no tengo amor. (1 Corintios 13:1-2) Entonces podemos llegar a la conclusión que cuando somos llenos del Espíritu Santo, Él llenará nuestros corazones de su amor, para que tengamos la capacidad de perdonar las ofensas y amar a los que nos han herido, e incluso a nuestros enemigos. Oro para que el Señor rompa con todo dolor y aflicción, que las calumnias, las ofensas y los señalamientos te hayan podido provocar ese resentimiento, hoy tiene que salir de tu corazón, en el Nombre de Jesús.

2- EL ESPÍRITU SANTO ES MÁS QUE PROFECÍAS
La mayor parte de la iglesia está cayendo en este engaño del enemigo, donde piensan que una persona que trata de adivinar el futuro para decirle a alguien aquello que viene para su vida es el único que está lleno del Espíritu Santo. Y yo creo en las profecías, pero esto tampoco manifiesta la llenura de su Espíritu Santo en su totalidad, porque a muchos Dios sólo les habla para otros, pero en sus hogares su testimonio no es el correcto, y sus vidas no reflejan la llenura espiritual de la que tanto se jactan.

Amado Lector: Esos dones y frutos que tanto le has pedido al Espíritu Santo, Él te los dará a la medida que te desligues del mundo y te vuelvas uno con Él. El Señor no sólo te hablará de su palabra, sino también de disciplina, y en ocasiones de reprensión, cuando ésta sea necesaria. Así que pon tu corazón a la disposición del Señor y búscale cada día en la oración y la meditación de su palabra, porque sin importar lo que te prepare el futuro, si Él está contigo todo saldrá bien, y verás su respaldo en todo lo que emprendas. Por esto mi consejo a través de este devocional, es que escuches la voz del Espíritu Santo, y puedes saber que tu casa también necesita de su llenura. Ten un corazón dispuesto y conectado en todo tiempo con el Padre, porque nuevas cosas Él desea manifestar en tu hogar. Amén.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes. Amén.

Fabio R. Ventura
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