EL DESIERTO Y SU PROPÓSITO

Éxodo 3:1-2 RVR1960| Apacentando Moisés las ovejas de Jetro su suegro, sacerdote de Madián, llevó las ovejas a través del desierto, y llegó hasta Horeb, monte de Dios. 2 Y se le apareció el Ángel de Jehová en una llama de fuego en medio de una zarza; y él miró, y vio que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía.

Dios siempre encuentra maneras de acercar al hombre a su presencia, y una de estas es el ser procesados en el desierto. El desierto tiene dos significados importantes: por un lado, representa el lugar donde Dios se revelará y el creyente puede tener un verdadero encuentro con su Creador; y por otro lado, representa también la sequedad, la prueba espiritual y la adversidad. La pregunta es: ¿Con cual te identificas tú?

Muchos de los que estamos aquí hemos enfrentado el desierto de diferentes formas, pero hoy quiero compartirles dos formas de entrar a ese lugar, pero salir de allí renovados y fortalecidos en la fe.

1- El Espíritu Santo te puede llevar para entregarte algo espiritual que te será de mucha utilidad para cumplir con la asignación que el cielo te ha encomendado aquí en la tierra, pero por otro lado vemos otra forma por la cual entramos al desierto y esta es la desobediencia y el pecado.Escucho en ocasiones hermanos decir que Dios lo está procesando porque están en el desierto, pero no se dan cuenta que donde hoy se encuentran es el resultado de sus malas decisiones, donde pasaron por alto la respuesta de Dios; entonces debes preguntarle a Dios ¿Que te trajo a este desierto donde hoy te encuentro? Si fue el Espíritu Santo entonces tienes el respaldo divino, y verás su gloria en medio del desierto, pero si estás allí por causa de tu rebeldía y desobediencia, te invito a que hoy reconozcas tu pecado y te vuelvas a Dios, Él es el único que te podrá sacar de este lugar de sequedad y escasez, no solamente financiera, sino también espiritual, porque ese vacío y frustración que vives experimentando, es el resultado por llevar una vida lejo de Su presencia.

AHORA QUIERO QUE NOS ENFOQUEMOS EN EL PRIMER PUNTO:

¿TE QUIERE DIOS ENTREGAR ALGO EN MEDIO DE TU DESIERTO?

EL LLAMADO DIVINO
Dios no se le apareció a Moisés mientras estuvo en el palacio, sino que fue en el desierto, y fue allí donde su poder se manifestó y le reveló el comienzo de su propósito para el cual había sido escogido por Él. Todo persona que es llamada por Dios lleva un tiempo de preparación y madurez espiritual, y empezarás a experimentar cómo pequeños detalles empezarán a marcar la diferencia en tí, verás cambios en tu carácter, porque el mismo será puesto a prueba, pero cambios en tus finanzas, en tu manera de hablar, de actuar, sentirás que necesitas pasar más tiempo con tu Creador, para conocer mejor que desea hacer contigo, así que no temas, porque en tu desierto te encontrarás con Él y verás su respaldo sobrenatural, para que otros pueden ser bendecidos a través de lo que Dios depositó en ti. Ejercerás tú llamado con autoridad, porque no es el hombre quien te hizo el llamado, sino fue Dios mismo que te ha escogido para este tiempo.

ENTRENAMIENTO Y RESPONSABILIDAD
Estas fueron dos palabras que Moisés tuvo que aprender y ponerla en práctica. Recordemos que en Egipto él no era pastor de ovejas, sino que tuvo que aprender todo sobre el cuidado de las ovejas que le fueron encomendada por su suegro Jetro, y aquí es donde viene la revelación de Dios, porque si él pudo aprender el cuidado con amor y responsabilidad, así mismo fue llamado por Dios para que pastoreará al pueblo de Israel en el desierto e introducirlos a la tierra prometida.

Amado lector, en ocasiones Dios prueba nuestra fidelidad entregándonos pequeñas cosas, para ver si en lo poco logramos serle fiel, porque muchas veces nos enfocamos más en el envoltorio, que en el contenido. No permitas que tus ojos naturales te enceguezcan y te impidan ver las maravillas que Dios tiene por enseñarte en medio del desierto. El desierto no es para siempre, es solo el instrumento que Él usará para sacar lo mejor de ti y perfeccionar tu fe y tu llamado. Porque cosa grande es la que Dios hará contigo, en el Nombre de Jesús. Amén.

Mateo 25:23RVR1960| Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes, Amén.

Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com

|Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
Reina-Valera 1960 |RVR1960

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