DERRIBANDO AL GIGANTE

1 Samuel 17:49-50 RVR1960| Y metiendo David su mano en la bolsa, tomó de allí una piedra, y la tiró con la honda, e hirió al filisteo en la frente; y la piedra quedó clavada en la frente, y cayó sobre su rostro en tierra. 50 Así venció David al filisteo con honda y piedra; e hirió al filisteo y lo mató, sin tener David espada en su mano.

El pueblo de Israel con todo su ejército estaba atemorizado del gigante Goliat, quien a parte de su gran estatura, aspecto físico, usaba las palabras para infundir temor y esta estrategia le funcionaba perfectamente, porque aún la mente del pueblo de Dios, estaban creyéndose las mentiras que este gigante vociferaba. La historia relata que día y noche durante cuarenta días, él decía las mismas palabras desafiantes contra los israelitas, y todos los que le escuchaban temblaban de pánico. Y hoy no estamos muy lejos de esta realidad, tenemos gigantes llamados crisis familiares, financieras, en la salud, que se han levantado para causar ansiedades y perturbación referente al futuro, porque todo lo que este gigante pronostica es ruina, escasez y pérdidas, y el enemigo de las almas está sacando ventaja de toda esta situación que el mundo está viviendo, para hacer que muchos desvíen su mirada de Jesucristo. Pero tú que estás leyendo este devocional, no puedes seguir prestándole tus oídos a la voz de estos gigantes, porque las voz de Dios dice que sus promesas son grandes y se cumpliran; Dios nunca ha perdido ninguna batalla, así que calla la boca de ese Goliat declarando su palabra, porque ese gigante se caerá en el nombre de Jesús.

¿CÓMO DERRIBAR ESE GIGANTE?

USA LO QUE TIENES A LA MANO
David no usó la armadura de Saúl, porque no fue diseñada para él, pero sí usó la honda que en ocasiones anteriores había usado contra el león y el oso. En ocasiones estamos tan afanados esperando el milagro que nos estancamos, y se nos olvida que ya Dios nos ha revestido de su Espíritu Santo, y este opera a través de nosotros, por ende puede hacer uso de él y convertir aquello que el mundo ve como normal, en una arma muy poderosa contra ese gigante, porque no fue la piedra que derrotó al gigante, esto solo fue el instrumento, lo que realmente lo derrotó fue la fe de David, quien le dio más peso a las promesas de Dios, que a la voz del gigante.Así que usa lo que tienes en la mano y vence al gigante.

Cierra tus oídos al temor y a las voces negativas, porque cuando el gigante menospreció el arma de David, este cerró sus oídos y siguió adelante, este fue el punto principal que le dió la victoria a David sobre aquel filisteo.

Y dijo el filisteo a David: ¿Soy yo perro, para que vengas a mí con palos? Y maldijo a David por sus dioses.
1 Samuel 17:43

Amado lector, muchos se podrán burlar e incluso menospreciar lo que hoy tienes en la mano, pero recuerda que no es el producto sino quien lo respalda, así que sigue adelante que con el emprendimiento que tienes, no permitas que otros lo menosprecien, ni mucho menos tú, porque por muy pequeño que sea, ese es el instrumento que Dios utilizará para derribar el gigante de la crisis que está atemorizando tu vida, y darás testimonio al mundo que Dios no salva con lanza y espada, sino con su Santo Espíritu. No escuches las voces del no puedo, no lo lograras, porque te vas a estancar y a frustrar, escucha la voz de Dios que te dice: Estoy contigo como poderoso gigante y te daré las estrategias que te llevarán a la victoria. Recuerda, no es del que se afana, sino del que Dios tiene misericordia (Romanos 9:16).

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes,
Fabio R. Ventura
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