DÍA 6: LA FE QUE CAMINA SOBRE LA ADVERSIDAD

SERIE: LA FE TRASCIENDE LO IMPOSIBLE Y LO HACE VISIBLE

Mateo 14:29-31|RVR1960
29. Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. 30. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! 31. Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?

Pedro como discípulo de Cristo vio muchos milagros y prodigios, pero nunca había experimentado algo como caminar sobre las aguas, esto fue maravilloso para él, llegando a ser el único que se atrevió a salir de la barca y caminar sobre la aguas hacia Jesús. ¿Pero que paso en el transcurso de este camino? Vemos que Pedro salió animado a caminar sobre las aguas, y podemos imaginar que cuando puso el primer paso en el agua y vio que podía hacerlo se sintió muy seguro, pero después de unos pasos empezó a sentir temor al ver la tormenta, la duda se apoderó de él; y esto suele pasarnos en nuestro diario vivir, iniciando un proyecto con ánimo y gozo, pero cuando viene la primera prueba dudamos que Dios esté con nosotros y queremos abortar ese proyecto, pero aquel que tiene su confianza puesta en Dios, no abandona lo que el cielo puso en sus manos.

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NO MIREMOS LA TORMENTA
Nuestros ojos son parte de la visión de Dios, cuando ves las cosas con ojos terrenales tu fe se basa en fundamentos humanos, que se pueden derrumbar ante cualquier tribulación, pero cuando aprendes haber la situación con los ojos de la fe, vas a darte cuenta que cualquier prueba que atraviesas no puede detener el plan de Dios para tu vida, porque él tiene el control absoluto de toda dificultad. Cuando te enfocas en los problemas en tu entorno y tu visión se desvía, te afecta, la mente es invadida con pensamientos de derrota, de desánimo, así que sacúdete y empieza a poner tu mirada por encima de las aguas que te quieran cubrir, tú has sido marcado por Dios para la eternidad, no permitas que tu entorno influya en tu estado de ánimo, nuestro Dios está por encima de toda tormenta, y desea llevarte a tener una vida confiada en él.

No pongamos la fe en nuestras fuerzas, no dudemos que Dios está con nosotros, no permitamos que la tristeza nos hunda, que los problemas que enfrentamos a diario nos envuelvan, aprendamos a decirle al Señor que nos ayude a alcanzar la visión que él tiene con nosotros, tengamos la seguridad que él nunca nos abandonará, soportemos las pruebas, confiando que grandes cosas Dios está preparando en medio de ese proceso.
La mejor temporada está por venir, abre tu corazón a lo nuevo que él está trayendo a tu vida, solo busca su voluntad y sigue los pasos de Jesús. Las tormentas que hoy estás enfrentando, no pueden determinar si llegas o no a tu destino, pero una fe determinada a caminar en sujeción y obediencia, te llevarán a conquistar el otro lado de la orilla. Tu zona de confort se está moviendo, pero no temas, porque son parte del avance que debes enfrentar, para llevarte a poseer lo nuevo que él Señor tiene para ti.

OREMOS: Señor, me rindo a ti, ayúdame a salir del abismo en el que me he sumergido, donde he perdido el horizonte, porque es desviado mi mirada de ti, siento que mi vida no tiene salida, y por más que trato de volver a ti, no encuentro el camino, perdona mis pecados y hazme libre por medio de la Sangre de Jesucristo, recíbeme como hijo tuyo y fortaléceme en medio del proceso, porque en mis fuerzas no puedo más, encargate de mis asuntos, dame paz, para poder entender el propósito que tienes conmigo, aún cuando yo mismo no entiendo la bondad de tu amor. En el Nombre de Jesús. Amén y amén.

LECTURA RECOMENDADA: Salmos 91

La Gracia sea con todos ustedes,
Fabio R. Ventura
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