Lucas 11:1-2 RVR1960|Aconteció que estaba Jesús orando en un lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a orar, como también Juan enseñó a sus discípulos. 2 Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
Desde hoy iniciamos esta SERIE DE FE SOBRE LA ORACIÓN, con el fin de enseñar al pueblo a orar de la manera correcta, y al mismo tiempo despertar esa pasión por la oración manteniendo el fuego encendido, que en ocasiones si te descuidas, puede apagarse llevándote a vivir una vida rutinaria, atado a lo natural y dependiendo de tu humanidad.
Cuando hablamos de oración debemos poner algunos puntos claros, porque muchos pueden orar, y aun a ídolos o falsos dioses. Pero nosotros los hijos de Dios debemos saber a quien le oramos. Según el Salmos 24:1| De Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan. En este versículo nos dice que la tierra y todo lo que hay en ella le pertenece a Jehová, entonces teniendo este conocimiento, nuestra oración no puede ser detenida por la limitación de nuestra mente natural, porque grandes cosas el Señor quiere entregarle a sus hijos por medio de la oración.
Notemos esto: En nuestro pasaje principal los discípulos le dicen a Jesús que los enseñe a orar, porque ellos habían descubierto de donde provenía el poder que Jesús manifestaba. En cambio hoy en día se les enseña más a los creyente a ser hombres de negocios, a alcanzar el éxito, a manejar las finanzas y nada de esto está mal, pero sin oración nada de esto está completo, porque lo primero que se debería enseñar en las iglesias y sobre todo a los nuevos creyentes, es a desarrollar una vida de oración.
Jesús le responde a este discípulo, y veamos estos puntos importantes en la oración:
1- CERCANÍA Y COMUNIÓN CON DIOS
Los judíos nunca llaman a Yahweh Padre, porque para ellos es una forma irreverente de hacerlo. Pero Jesús viene y trae esta revelación muy profunda, haciéndonos ver que ya no somos ovejas descarriadas y sin pastor, sino que tenemos un Padre que tiene cuidado de nosotros y así es como debemos ver la relación, cercana y sincera, sabiendo que todo aquello que Dios nos ha entrega es por amor, porque fuimos hechos sus hijos por medio del sacrificio de Jesucristo en la cruz del calvario. (Léase 1 Juan 3:1-2). Así que ya no debes ver la oración como algo lejano, sino que te acerca al Padre Celestial. Y si has descuidado tu relación con Dios, es tiempo de volver al Padre, y rendirle tu vida, porque Él siempre está disponible. ¡Que amoroso y maravilloso Padre tenemos!!!
DESARROLLANDO UNA FE SÓLIDA
La confianza de Padre a hijo te lleva a desarrollar una fe más sólida. La Biblia nos dice en Lucas 11:13| Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?. El Padre eterno es capaz de darnos a su Santo Espíritu que es lo más valioso que existe, imaginemos las cosas materiales. Porque para el que ora con la revelación de quién es su Padre, el cielo es su límite, porque si Dios es capaz de darnos lo más valioso de Él, cuanto más las cosas materiales que solo son perecederas.
Amado Lector, la oración no es solo para aquellos elocuentes y letrados que tienen una buena oratoria y hablan bonito, sino para todo aquel que sabe quién es Cristo, y que tiene un Padre en los cielos que los entiende y que a pesar de los múltiples errores siempre quiere perfeccionar su obra en tu vida. No lo veas como a un Dios lejano, porque no lo es, Él es tu Padre Celestial y los planes que tiene contigo se cumplirán, porque nada de lo que has atravesado, ha sido para matarte, sino para acercarte más a su presencia. Amén
La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes. Amén.
Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas
RVR1960|Reina-Valera 1960
CAMINANDO COMO JESÚS 