1 Reyes 18:44 RVR1960| A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje.
El profeta Elías tenía una palabra de Dios que lo respaldaba, por esto cuando él dijo: Preséntate a Acab porque lloverá sobre la tierra, era porque él sabía que el tiempo de sequía había concluido, y que las fuentes de los cielos se abririan y regarían la tierra. Aunque la palabra fue soltada por Dios, el profeta tuvo que orar y persistir en la oración para el cumplimiento de esta palabra; en ocasiones suele ocurrirnos lo mismos, Dios nos da una promesa pero la creemos en el momento, y pasamos unos días orando por esta, y al no ver respuesta, desistimos de la oración y terminamos desechando esa promesa, y esto es un error, no podemos soltar la oración hasta que esa palabra se cumpla en nuestras vidas porque si Dios lo dijo, él cumplira. Me llama la atención que el profeta no necesito ver con sus ojos naturales, para saber que pronto el cielo se oscurecería y que la palabra llegaría a cumplimiento, le bastó con visualizar una pequeña nube, para saber que la palabra había llegado a cumplimiento.
No menosprecies las cosas pequeñas que hoy Dios te permite ver, porque por medio de tu fe, aquello que es pequeño se puede volver grande. ¿Que estás viendo? ¿Cual es tu pequeña nube?
Y aunque tu principio haya sido pequeño, tu postrer estado será muy grande.
Job 8:7|RVR1960
El proceso que hoy vives es tu pequeña nube, porque todo desierto anuncia que vas camino a la tierra prometida, y es allí donde debe estar puesta tu fe, lo que hoy vives no es para siempre, Dios te sacará en victoria de este desierto y contaras las maravillas del Señor; pero debes resistirte de rodillas, peleando la batalla hasta que la victoria llegue a manifestarse en lo natural. Quizás estás cansada de orar por el mal comportamiento de tu cónyuge, tus hijo o simplemente por la situación financieras que vives, pero quiero animarte por medio de esta palabra a que sigas orando por el cumplimiento de la promesa, aunque hoy veas lo contrario, tu oración cambiará el rumbo de tu familia para que tengan un encuentro personal con Cristo, el único salvador de este mundo. Tu proceso es por un momento, pero sus bendiciones son eternas; sigue avanzando hacia la tierra prometida, porque pronto llegarás en victoria.
Un enfoque cristocéntrico, es todo lo que necesitas para superar los desiertos que puedan azotar tu casa, y el profeta Elías entendió que Dios le había prometido lluvia, y que esto preservará la vida del pueblo de Israel, porque esa lluvia haría producir aquello que por años fue infructuoso. Tu oración hará que la palabra de Dios produzca fruto en los corazones endurecidos, y así alcancen la vida eterna. Puede que haya áreas de tu vida que hoy día estén secas y sin frutos, pero la perseverancia en la oración hará que eso que hoy está sin fruto, se abra, para que el milagro ocurra y puedas producir frutos en gran manera. Amado lector, una gran lluvia se aproxima para tu vida, solo resiste este proceso en el altar de oración usando las fuerzas y el poder de Dios para vencer el desánimo y la incredulidad que el desierto puede provocar. No desistas de orar por tu promesa, porque llegará a cumplimiento en el tiempo perfecto de Dios y veras que cruzar el desierto no fue inútil, porque este te llevo a tu tierra prometida.
La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes,
Fabio R. Ventura
http://www.caminandocomojesus.com
|Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960
CAMINANDO COMO JESÚS 