Isaías 9:6 RVR1960|Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
La natividad no es solo un evento histórico; es el cumplimiento de una promesa eterna. En medio de un mundo necesitado de redención, Dios mismo decidió intervenir. Jesús, el Hijo de Dios, vino al mundo no en un palacio, sino en un humilde pesebre, recordándonos que la verdadera grandeza se encuentra en la humildad y el amor. Este acto de amor divino nos invita a mirar más allá de las circunstancias y a abrazar la esperanza que Él nos trae.

Este tiempo nos recuerda que no estamos solos. Así como los pastores recibieron la noticia con gozo y los magos viajaron largas distancias para adorar al Salvador, hoy también podemos acercarnos a Él con corazones llenos de gratitud y fe.
En la Natividad encontramos una invitación a compartir. Compartir el amor que Dios nos mostró al enviar a Su Hijo, compartir la esperanza de que no importa cuán oscuro sea el camino, la luz de Cristo siempre brillará, y compartir la paz que sobrepasa todo entendimiento, la misma que los ángeles proclamaron en Lucas 2:14: «¡Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres!»
Este tiempo es un llamado a reflejar a Jesús en nuestras vidas. Es un momento para extender una mano al necesitado, para perdonar al que nos ha ofendido y para recordar que el mayor regalo que podemos dar es el amor de Cristo.
Amado lector, que la Natividad sea para ti y tu familia un tiempo de renovación espiritual, de unión y de gozo. Así como el nacimiento de Jesús transformó la historia, que también transforme tu corazón. Hoy, más que nunca, celebremos la llegada de nuestro Salvador con fe, amor y paz. Él es el Emmanuel, «Dios con nosotros», y Su presencia es el mayor regalo que podemos recibir y compartir. Que este tiempo sea una oportunidad para amar más, para esperar en Sus promesas y para caminar en la paz que sólo Él puede dar. ¡Feliz Navidad!
Mateo 1:23 RVR1960|He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel,
Con amor,
Sandra Patricia Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960