Lucas 1:6-7 RVR1960|6 Ambos eran justos delante de Dios, y andaban irreprensibles en todos los mandamientos y ordenanzas del Señor. 7 Pero no tenían hijo, porque Elisabet era estéril, y ambos eran ya de edad avanzada.
Mientras meditaba en este versículo, una palabra que resaltaba a mi vista era: Pero no tenían… Zacarías y Elisabet eran un matrimonio piadoso, fiel, obediente, todo en su vida decía que caminaban rectos delante de Dios; sin embargo, había un vacío. Una ausencia que dolía profundamente: no tenían hijo. ¡Cuántas veces nosotros también vivimos capítulos en nuestras vidas donde parece que todo está bien, pero hay un “pero” que nubla la historia!

“Pero no tengo salud…” “Pero no tengo trabajo…” “Pero no tengo paz en mi hogar…” “Pero no tengo respuesta a mi oración…” A veces esos “pero” nos hacen pensar que Dios no nos mira, que se ha olvidado de nosotros, que nuestros días de oración y fidelidad han caído en saco roto, pero quiero decirte algo hoy con todo mi corazón: Permanecer en Dios es creer que Él no solo ve tu fidelidad, sino que está escribiendo algo mayor que tu dolor presente.
Notemos esto, Dios no se olvida de los justos. La Biblia recalca que Zacarías y Elisabet eran justos. No perfectos, pero sí íntegros, temerosos de Dios. Su esterilidad no era castigo, ni falta de fe, era parte de un plan que ellos no podían entender aún. Dios no ignora tus lágrimas ni tu obediencia; aunque el cielo parezca de bronce, Él escucha tus oraciones y las guarda como incienso en Su presencia.
Apocalipsis 5:8 RVR1960| Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos;
El tiempo humano es cronos, se refiere a días, meses, años que corren sin parar. Pero el tiempo de Dios es kairos: momentos exactos, intersecciones divinas, cuando lo imposible se hace posible. El kairos de Dios llega en su momento. Zacarías y Elisabet no sabían que su “pero no tenían hijo” se convertiría en Dios les dio a Juan el Bautista, el mayor profeta nacido de mujer. Su historia era el prólogo de un milagro que iba a preparar el camino del Señor. Quizá hoy no entiendes tus peros, no sabes por qué Dios no ha respondido todavía, pero en el kairos de Dios, lo que no tienes puede convertirse en testimonio.
Lucas 7:28 RVR1960| Os digo que entre los nacidos de mujeres, no hay mayor profeta que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él.
Dios tiene todo el control. La esterilidad de Elisabet no detuvo a Dios, su vejez no fue obstáculo, nada limita su poder. Tu situación, por dura que sea, está en manos del Soberano. Él puede abrir puertas, sanar, proveer, restaurar, aunque hoy no veas cambios, Dios sigue trabajando en lo invisible. Así que sigue orando, sigue caminando recto delante de Él, que en su tiempo veras su favorecimiento.
Isaías 30:18 RVR1960|Por tanto, Jehová esperará para tener piedad de vosotros, y por tanto, será exaltado teniendo de vosotros misericordia; porque Jehová es Dios justo; bienaventurados todos los que confían en él.
Amado lector, Zacarías y Elisabet nos enseñan que permanecer en Dios es confiar aunque haya un pero en nuestra historia. Es creer que Dios escucha, que su kairos es perfecto y que su voluntad es buena, agradable y perfecta. Si hoy tienes algo que decirle a Dios, aunque tus palabras salgan entre lágrimas, díselo. Él te escucha. Tus: pero no tengo, no será el punto final de tu historia. ¡Dios tiene todo bajo control y Él llegará en su tiempo perfecto! En el nombre de Jesús. Amén.
Hebreos 10:23 RVR1960|Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.
Con amor,
Sandra Patricia Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960|Reina-Valera 1960