Efesios 6:11-13 RVR1960|11 Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. 12 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. 13 Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes.
En tiempos donde la oscuridad parece ganar terreno, Dios nos recuerda que somos soldados en Su ejército. Él nos ha dotado de Su «armadura de Dios» para estar firmes. Cada pieza de esta armadura representa una herramienta vital: la verdad, la justicia, el evangelio de la paz, la fe, la salvación y la espada del Espíritu. Cuando el enemigo lanza sus ataques, Dios nos llama a poner toda nuestra confianza en Él, y vestirnos de Su fuerza y poder. Con Su armadura, estamos listos para resistir y vencer en el día malo.
Esta armadura consiste en el cinturón de la verdad, la coraza de justicia, el calzado del evangelio de la paz, el escudo de la fe, el casco de la salvación y la espada del Espíritu. Cada pieza representa un aspecto fundamental de la vida cristiana, simbolizando así nuestra dependencia en Cristo.
Isaías 59:17 RVR1960| 17 Pues de justicia se vistió como de una coraza, con yelmo de salvación en su cabeza; tomó ropas de venganza por vestidura, y se cubrió de celo como de manto,
La verdad (el cinturón) nos ayuda a discernir las mentiras del enemigo. La justicia (la coraza) protege nuestro corazón, recordándonos que somos hechos justos en Cristo. La fe (el escudo) nos permite apagar los dardos encendidos de duda y temor que el enemigo lanza. La salvación (el casco) protege nuestra mente de pensamientos que nos apartan de Dios. La Palabra de Dios (la espada) es nuestra arma ofensiva, recordándonos las promesas de victoria.
Romanos 13:12 RVR1960| La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz.
Amado lector, La armadura de Dios es un recordatorio de que la guerra espiritual se libra en el ámbito espiritual. No estamos solos en esta batalla; el Señor pelea con y por nosotros. Cada mañana, recuerda orar y “vestirte” espiritualmente con esta armadura para que la victoria de Cristo se manifieste en tu vida. Oremos juntos: Padre Celestial, en este día me acerco a Ti reconociendo que necesito Tu fortaleza y Tu protección para enfrentar cada desafío que me presenta la vida. Gracias por proveerme Tu armadura, por darme la verdad que me mantiene firme y la justicia que protege mi corazón. Que el evangelio de la paz guíe mis pasos, y que la fe sea mi escudo contra cada ataque del enemigo. Cubre mi mente con el casco de la salvación y permite que mi mente y pensamientos permanezcan firmes en Ti. Y finalmente, dame la valentía de empuñar la espada del Espíritu, Tu palabra viva y poderosa, para vencer las tinieblas que se puedan presentar en mi vida y alrededor de mí. En el nombre de Jesús, Amén.»
Salmos 18:32-35 RVR1960| 32 Dios es el que me ciñe de poder, Y quien hace perfecto mi camino; 33 Quien hace mis pies como de ciervas, Y me hace estar firme sobre mis alturas; 34 Quien adiestra mis manos para la batalla, Para entesar con mis brazos el arco de bronce. 35 Me diste asimismo el escudo de tu salvación; Tu diestra me sustentó, Y tu benignidad me ha engrandecido.
Que Dios te bendiga ricamente en este nuevo día. Mantente expectante de las cosas grandes que Dios va hacer sobre ti.
Con amor,
Sandra Patricia Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960
Caminando como Jesús 