Lucas 22:14-20 RVR1960| 14 Cuando era la hora, se sentó a la mesa, y con él los apóstoles. 15 Y les dijo: ¡Cuánto he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca! 16 Porque os digo que no la comeré más, hasta que se cumpla en el reino de Dios. 17 Y habiendo tomado la copa, dio gracias, y dijo: Tomad esto, y repartidlo entre vosotros; 18 porque os digo que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga. 19 Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. 20 De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.
La noche en que Jesús instituyó la Cena del Señor, estaba preparando el camino para una liberación aún mucho más grande que la del pueblo de Israel en Egipto. Lucas 22:14-20 nos recuerda que este acto no fue solo un simbolismo, sino el inicio de un nuevo pacto que transformaría las vidas de la humanidad. La Pascua representaba la liberación del pueblo de Israel de la esclavitud, quien por cuatrocientos treinta años, vivieron oprimidos, pero Dios intervino con señales y prodigios. Sin embargo, esa liberación tenía limitaciones:
- Limitación geográfica: Era exclusivamente para el pueblo de Israel.
- Limitación espiritual: Aunque fueron liberados físicamente, continuaban atrapados en la esclavitud del pecado.
- Limitación en la adoración: Sólo el sumo sacerdote podía entrar al lugar santísimo una vez al año, lo que restringía el acceso a la presencia de Dios.
Pero lo que hizo Jesucristo , fue mucho más grande, Él instauró un Nuevo Pacto; Cristo vino a cumplir y a expandir esta obra redentora:
1. Un pacto para todos: Romanos 10:13 nos asegura que «todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.» Su gracia no conoce fronteras.
Hebreos 9:15 PDT| De manera que Cristo trae un nuevo pacto a los que son llamados por Dios. Así tendrán por siempre lo que él prometió, porque Cristo murió para librarlos de los pecados que cometieron cuando estaban bajo el pacto antiguo.
2. Libertad total: La libertad que Jesús ofrece es interior. En Juan 8:31-37, Él nos recuerda que, aunque somos descendientes de Abraham, necesitamos liberarnos del pecado. Solo en Él encontramos la verdadera libertad.
Gálatas 5:1 PDT|Ahora somos libres porque Cristo nos liberó. Manténganse firmes en la libertad y no vuelvan a la esclavitud.
3. La comunión con el Padre: Mateo 27:50-51 nos muestra cómo el velo del templo se rasgó, permitiéndonos acceder a la presencia de Dios. Ya no somos extranjeros, sino hijos amados.
Efesios 2:18 PDT| Por medio de Cristo todos podemos acercarnos al Padre en el mismo Espíritu.
Amado lector, el primer paso hacia nuestra liberación es romper con las cadenas mentales. Debemos aprender a pensar como hijos de Dios. Aunque enfrentes tormentas, recuerda que Dios está contigo y manifestará Su poder en cada necesidad. Oremos juntos: Padre celestial, ayúdame a entender la profundidad de Tu sacrificio y la libertad que ofreces. Que mi mente sea renovada para ver la vida desde Tu perspectiva y caminar en la verdad que me hace libre; y no permitas que yo sea instrumento del enemigo para sabotearme a mí mismo y verme cómo una persona incapaz, todo esto te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.
Romanos 12:2 RVR1960|No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.
Con amor,
Fabio R. Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960
PDT| Palabra de Dios para Todos
Caminando como Jesús 