Venciendo las tentaciones en el desierto

El desierto no es solo un lugar de pruebas, sino que también puede convertirse en un lugar de tentación. Cuando estamos cansados, desanimados y débiles, el enemigo busca aprovecharse de nuestra vulnerabilidad. Sin embargo, las tentaciones que enfrentamos en el desierto no son insuperables. Al contrario, son oportunidades para que nuestra fe sea fortalecida y probada; y Su Palabra será el instrumento utilizado por Su Espíritu Santo para ayudarte a vencerlas.

1 Corintios 10:13 RVR1960| No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.

En medio de la soledad y la desesperación, el enemigo intentará desanimarte, para arrastrarte hacia decisiones poco acertadas, con el único propósito de desenfocarte de tu caminar con Jesucristo. Sin embargo, así como Jesús nos mostró que a través de la Palabra de Dios, también nosotros a través de la misma, podremos vencerlo. 

Salmos 46:1-3 RVR1960|1 Dios es nuestro amparo y fortaleza, Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones. 2 Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida, Y se traspasen los montes al corazón del mar; 3 Aunque bramen y se turben sus aguas, Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah

La tentación de Jesús
Jesús enfrentó tres tentaciones en el desierto: la necesidad física (convertir las piedras en pan), el orgullo (lanzarse del templo) y el poder (recibir todos los reinos del mundo). En cada una de estas tentaciones, Jesús usó la Palabra de Dios como su defensa. La tentación de Satanás buscaba apartar a Jesús de Su misión divina, pero Jesús, confiando en las Escrituras, resistió cada intento del enemigo. Satanás tentó a Jesús en tres áreas clave de todo ser humano, pero en cada una de ellas Jesús le resistió. (Leer Mateo 4:1-11)

Las tentaciones no son el fin, sino parte del proceso para el fortalecimiento espiritual. Cada tentación es una oportunidad para reafirmar nuestra fe en Dios y demostrar nuestra fidelidad. En el desierto, cuando enfrentamos pruebas, debemos recordar que Dios es más grande que toda prueba.

Deuteronomio 2:7 RVR1960| pues Jehová tu Dios te ha bendecido en toda obra de tus manos; él sabe que andas por este gran desierto; estos cuarenta años Jehová tu Dios ha estado contigo, y nada te ha faltado.

Aunque el desierto sea un lugar de tentaciones, también es un campo de entrenamiento espiritual. Y son en esos momentos donde nuestra dependencia de la Palabra de Dios se fortalece, y al resistir las tentaciones, salimos más victoriosos y fortalecidos en nuestra fe. Confía, el desierto no podrá detener. 

Isaías 58:11 RVR1960|Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan.

Que Dios te bendiga ricamente en este nuevo día. Mantente expectante de las cosas grandes que Dios va hacer sobre ti

Con amor,
Sandra Patricia Ventura

Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960

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