Hebreos 11:1 RVR1960| Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.
La fe es la llave que abre las puertas del favor divino. Si hay algo que Dios busca en nosotros es la fe. No es solo la llave que abre puertas, sino la actitud que mueve el corazón de Dios para actuar a nuestro favor. En Hebreos 11 nos ofrece un recorrido por la vida de hombres y mujeres que alcanzaron grandes victorias no porque tuvieran fuerza o sabiduría humanas, sino porque confiaron en Dios por encima de las circunstancias.
Fue a través de esa fe que ellos vieron lo invisible y caminaron hacia lo imposible. Y es lo mismo que aun en estos tiempos quiere hacer con Sus hijos, verlos caminando sobre caminos que se van abriendo a medida que vas dando los pasos de fe. Empieza, porque hoy es el día de ver lo extraordinario de Dios obrando a nuestro favor.

Hebreos 11:6 dice que sin fe es imposible agradar a Dios. Cuando caminamos por fe, vemos más allá de las barreras físicas y confiamos en el poder de Dios para abrir puertas sobrenaturales, porque nuestra fe nos puede llevar a conquistar grandes territorios y a obtener victorias inesperadas.
Hebreos 11:6 RVR1960| Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
En nuestras vidas, la fe actúa como la llave que abre las puertas que parecían cerradas para siempre. A veces, Dios permite que enfrentemos desafíos para probar la calidad de nuestra fe, como lo hizo con Abraham cuando le pidió sacrificar a Isaac. La fe no siempre se trata de recibir lo que esperamos en el momento que lo deseamos, sino de confiar en que el plan de Dios siempre es mejor que el nuestro. Él puede abrir puertas que nos lleven a bendiciones mayores de lo que podemos imaginar, siempre y cuando nuestra fe esté completamente puesta en Él.
Mateo 17:20 NVI| —Por la poca fe que tienen —respondió—. Les aseguro que si tuvieran fe tan pequeña como una semilla de mostaza, podrían decirle a esta montaña: “Trasládate de aquí para allá” y se trasladaría. Para ustedes nada sería imposible.
Amado lector, el primer paso para que las puertas se abran en nuestras vidas es fortalecer nuestra fe en Dios. Cuando confiamos en Su poder, vemos cómo lo imposible se hace posible. La fe en Dios es esencial para que las puertas que Él tiene para nosotros se abran. En lugar de enfocarnos en las dificultades, debemos entrenar nuestro espíritu para ver lo que Dios puede hacer. La fe nos conecta con Su favor, Su poder y Su propósito. Mantengamos nuestros ojos en Cristo, confiando en que, aunque las circunstancias digan lo contrario, Él abrirá la puerta correcta en Su tiempo. El primer paso para que las puertas se abran en nuestras vidas es fortalecer nuestra fe. Cuando confiamos en Su poder, vamos a ver lo imposible hacerse posible.
Marcos 11:24 NVI| Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración y lo obtendrán.
¡Que Dios te bendiga ricamente en esta nueva temporada y mantente expectante de las cosas grandes que Dios va hacer!
Con amor,
Sandra Patricia Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
RVR1960| Reina-Valera 1960
NVI|Nueva Versión Internacional