Versículo del día:
Jeremías 29:11 NVI| Porque yo conozco los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.
Dios sigue siendo el mismo ayer hoy y siempre, y su Palabra sigue siendo viva y eficaz, así que es hora de levantarse y dejar obrar a Su Espíritu Santo. Cada uno de nosotros hemos tenido que enfrentar incertidumbre y desafíos que nos lleva a cuestionarnos sobre nuestro futuro; pero cuando tenemos una fe cimentada en la Roca firme que es Cristo, podremos tener paz en medio de los cambios. La Biblia nos recuerda que Él tiene planes para nosotros, planes que nos llenan de esperanza y nos garantizan un futuro de bendiciones y nuevas oportunidades. Por eso a través de este pasaje veremos cómo esta promesa puede transformar nuestra perspectiva y fortalecer nuestra fe continuamente.

Notemos esto:
1- La soberanía de Dios sobre nuestro futuro. Dios declara con firmeza que Él sabe los pensamientos que tiene acerca de nosotros. Esto nos recuerda que Dios es soberano y tiene el control absoluto sobre nuestro futuro. No importa cuán inciertas o difíciles sean nuestras circunstancias actuales, podemos confiar en que Dios tiene un plan perfecto. Recuerda que, sin importar lo que hoy enfrentes, Dios tiene un plan de paz para ti. Su propósito es darte un futuro lleno de esperanza. Ora y confía en que Él te guiará y te dará la fuerza para superar cualquier desafío.
Eclesiastés 7:14 RVR1960| En el día del bien goza del bien; y en el día de la adversidad considera. Dios hizo tanto lo uno como lo otro, a fin de que el hombre nada halle después de él.
2- Planes de paz y no de mal. Dios no solo tiene pensamientos sobre nosotros, sino que esos pensamientos son de paz y no de mal. Esto significa que Su intención es bendecirnos y prosperarnos, no causarnos daño. A veces, enfrentamos situaciones difíciles que no entendemos, pero podemos estar seguros de que Dios está obrando todo para nuestro bien. Busca en todo tiempo la voluntad de Dios a través de la oración y estudio Su Palabra. Permítele al Espíritu Santo guiar tus pasos. Alinéate con Su propósito.
Salmos 143:10 RVR1960| Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.
3- Una esperanza y un futuro. La promesa de Dios es darnos el fin que esperamos. Este «fin» no se refiere simplemente a un destino final, sino a un futuro lleno de esperanza y propósito. Cuando ponemos nuestra confianza en Dios y buscamos Su dirección, podemos estar seguros de que nuestro futuro estará lleno de Sus bendiciones. No te desesperes si aún no ha llegado el tiempo de su cumplimiento, porque en su tiempo perfecto lo verás hecho. Mantén la esperanza en Su promesa. Aunque no veas los resultados inmediatos, confía en que Él está obrando en tu vida. Recuerda que Sus pensamientos son más altos que los tuyos y que Su plan es perfecto.
Habacuc 2:3 RVR1960| Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará.
Amado lector, Dios tiene un plan maravilloso para nuestras vidas. Él nos ofrece paz, esperanza y un futuro lleno de bendiciones. Enfrenta cada día con la confianza de que Dios está contigo y que Su propósito en ti se cumplirá. ¡Permanece firme en Su promesa y deja que Su paz llene tu corazón!
Isaías 55:8-9 RVR1960| 8 Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. 9 Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.
Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.
Con amor,
Sandra Patricia V.
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
NVI|Nueva Versión Internacional
RVR1960| Reina-Valera 1960