Día 5: Fortalecidos en el ayuno y la oración

Serie 21 días de Ayuno 
Mateo 6:17-18 NTV|17 Pero tú, cuando ayunes, péinate[a] y lávate la cara. 18 Así, nadie se dará cuenta de que estás ayunando, excepto tu Padre, quien sabe lo que haces en privado; y tu Padre, quien todo lo ve, te recompensará.

El ayuno y la oración son dos prácticas espirituales fundamentales en la vida del creyente. En tiempos de ayuno, nos abstenemos de alimentos que nos producen deleite físico y tomamos este tiempo para alimentar nuestro espíritu y acercarnos más a Dios en oración y lectura de Su Palabra. Sin embargo, Jesús nos enseña en Mateo 6 que el ayuno no debe ser una exhibición pública de nuestra devoción, sino un acto de intimidad con nuestro Padre celestial.

Hebreos 4:16 RVR1960| Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

Durante estos 21 días de ayuno, es importante que lo hagamos con un corazón sincero y humilde, buscando la voluntad de Dios en nuestras vidas y no dejando que las cosas efímeras de este mundo nos distraigan, ni nos saquen de la comunión que hemos decidido establecer con nuestro Amado Padre durante estas semanas. No se trata de vivir de apariencia para impresionar a alguien, sino que su presencia se vea manifestada en nosotros, sin siquiera abrir nuestros labios. 

Amado lector, durante esta semana, dedica tiempo cada día a buscar a Dios en oración y ayuno. Aparta momentos de tu rutina diaria para estar a solas con Él, buscando su dirección y fortaleza para tu vida. Así que recuerda que tu recompensa no viene de la aprobación de los hombres, sino del Padre Celestial que ve en lo secreto, y te recompensará en público.

Oremos juntos, Padre celestial, hoy venimos ante ti en humildad y sinceridad, buscando tu rostro en oración y ayuno. Ayúdanos a apartar todo lo que nos aleje de ti y concédenos la fortaleza para mantenernos firmes en nuestro propósito. Que mi ayuno y mi  oración sean fragantes delante de ti, y que en lo secreto de mi corazón pueda experimentar tu presencia de manera única y sobrenatural. En el nombre de Jesús, amén.

Salmos 143:10 RVR1960| Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; Tu buen espíritu me guíe a tierra de rectitud.

Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.

Con amor,
Sandra Patricia Ventura

Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
NTV|Nueva Traducción Viviente
RVR1960|Reina-Valera 1960