Lucas 15:19-21 TLA| Le diré que no merezco ser su hijo, pero que me dé empleo, y que me trate como a cualquiera de sus trabajadores.” 20 Entonces regresó a la casa de su padre. Cuando todavía estaba lejos, su padre corrió hacia él lleno de amor, y lo recibió con abrazos y besos. 21 El joven empezó a decirle: “¡Papá, me he portado muy mal contra Dios y contra ti! ¡Ya no merezco ser tu hijo!”
Hay decisiones que tomamos en nuestro pasado, que aún siguen afectando y muchos de esos traumas o ciclos que no logramos superar, son producto de la mala relación que tuvimos con uno de nuestros padres. Podemos huir de casa, podemos dejar de llamarles, he incluso hacernos a la idea que esa persona ya murió para nosotros; pero en realidad, si no logras perdonar y perdonarte, es muy difícil que puedas ser libre de ese sentimiento que por años has escondido y ocultado de otros.
Dios esta semana nos ha llevado a compartir sobre el hijo pródigo volviendo a casa, y es porque esta maravillosa historia nos enseña la importancia de perdonar. Vemos un hijo que reconoce sus errores y regresa a casa, y un Padre que corre con los brazos abiertos para recibir a su hijo. Cuando Dios está en el asunto los argumentos o los discursos que podamos tener preparados, sinceramente no harán falta, porque dos personas que aceptaron el perdón, podrán vencer los obstáculos y sanar las heridas del dolor. Y así cómo este padre esperaba a su hijo, así mismo está nuestro Padre Celestial esperando por ti. ¡Es tiempo de volver a casa, no sigas retrasando este momento!
2 Corintios 6:18 TLA| 18 »Yo seré para ustedes como un padre, y ustedes serán para mí como mis hijos y mis hijas. »Esto lo afirmo yo, el Dios todopoderoso.»
Notemos esto: El primer paso para la restauración es volver a la presencia del Padre, porque es allí donde otra vez se te dará aquello que por un tiempo dejaste perder. Cuando te alejas de la casa del Padre, también te terminas alejando de su presencia; pero que hermoso es Dios, que aún nosotros habiendo perdido nuestra identidad de hijo, Él nunca dejó de identificarse cómo nuestro Padre. Su amor no tiene límites; Él es misericordioso, y aquel que te entregó todo y jamás te desechó, sigue esperando pacientemente por ti.
El amor del Padre se manifiesta en el perdón que siempre está dispuesto a darnos. Ciertamente el hijo pródigo merecía el rechazo, o incluso la muerte, pero en cambio recibió la restauración de lo perdido, y esto mismo es lo que deseo que entiendas, el Padre no te rechazará, tampoco te dará conforme a lo que mereces, sino que su gracia y favor son tan grandes, que te devolverá lo que un día dejaste y retomarás tu posición de hijo legitimo.
Amado Lector, no importa lo que perdiste cuando te alejaste del Padre, no te enfoques en eso, pon tu mirada en lo que recibirás cuando decidas caminar hacia tu restauración y vestirte de su gloria. Así que levántate hoy en fe y corre a la casa del Padre, porque allí Él ha mandado a preparar lo mejor para ti. Amén.
Lucas 15:22-24 TLA| 22 »Pero antes de que el muchacho terminara de hablar, el padre llamó a los sirvientes y les dijo: “¡Pronto! Traigan la mejor ropa y vístanlo. Pónganle un anillo, y también sandalias. 23 ¡Maten el ternero más gordo y hagamos una gran fiesta, 24 porque mi hijo ha regresado! Es como si hubiera muerto, y ha vuelto a vivir. Se había perdido y lo hemos encontrado.” »Y comenzó la fiesta.
Que la gracia y el favor de nuestro Señor Jesucristo sea con todos ustedes.
Con amor,
Fabio R. Ventura
Abreviaturas de las diferentes Biblias utilizadas:
TLA|Traducción en lenguaje actual
Caminando como Jesús 